La Justicia los alejó de sus padres para protegerlos. Viven en instituciones o con familias cuidadoras. Buscan agilizar los trámites legales, que es la traba mayor para que encuentren una familia.
Lunes, 03 de agosto de 2009 En Mendoza hay más de mil niños y adolescentes que viven con familias cuidadoras o en hogares del Estado porque fueron alejados de sus padres, ya sea porque eran víctimas de maltrato, abuso, abandono u otras razones que consideró la Justicia.
Algunos ingresan siendo bebés y llegan a los 12 años o más sin haber pasado por un contexto familiar del cual sentirse parte. Gracias a la nueva mirada que plantea la Ley 26.061, la provincia busca agilizar los mecanismos para que los chicos que no se puedan reintegrar a su ambiente de origen, sean adoptados por otra familia.
Con las prácticas anteriores, dictar el estado de adoptabilidad para un chico demoraba muchos años. Tantos como los que esperan los padres que se anotan en el RUA (Registro Único de Adopción) para encontrar un destinatario de su afecto.
"Hay buen diálogo con el Poder Judicial para apurar el mecanismo. La traba mayor es legal. Los procedimientos son engorrosos y no dan la respuesta rápida que necesitan estos chicos. A veces la cuestión se resuelve cuando los niños son grandes y es más difícil que los quieran adoptar", señala Marcelo Briccola, director de Restitución de Derechos de la Dinaf (Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia).
Claro que la ecuación no es tan sencilla. Están los llamados ?casos históricos', que son los que no se terminan de resolver ni en lo vincular ni en lo legal, pues siguen relacionados de alguna manera con su familia (aunque sólo fuera con una visita de su papá cada 6 meses).
Estar bajo la tutela del Estado debe ser una medida excepcional. Los padres son los primeros responsables, por eso la nueva ley de Niñez y Adolescencia da un plazo de 90 días -con posibilidad de extenderlo a otros 90- para reintegrar al niño a su familia o a su entorno cercano (parientes, amigos, vecinos). Si después de una serie de estudios y tratamientos el equipo de profesionales considera que esto no es posible, el niño podría ser dado en adopción.
Según datos de la Dinaf, de los chicos judicializados (zona Este, Norte y Valle de Uco) 94 tienen alguna chance de retornar a su hogar, 284 están en proceso de evaluación y 121 no tienen ningún contacto con su familia.
"De este último grupo, hay 37 que ya están en condiciones de pasar a una familia adoptiva y no lo han hecho por los tiempos y procesos legales", manifestó Briccola. El funcionario contó que otros 61 obtendrán su estado de adoptabilidad en cuestión de 2 ó 3 meses y los 27 niños y adolescentes restantes ya lo tienen, pero no encuentran familias ya sea por su edad avanzada o por padecer alguna discapacidad.
"Hemos capacitado y reforzado a los cuidadores de los hogares, pero nunca podremos darles el calor familiar. Los chicos viven su ingreso como una situación de secuestro", reconoce Briccola. De los 1.161 niños y adolescentes mendocinos bajo medidas excepcionales, 531 viven en hogares estatales y 630 con familias cuidadoras. "No son más, porque no hay gente que se proponga para este servicio", dijo.
Una realidad que avanza
Cuando le preguntan la edad, B. muestra tres dedos de su mano, pero tiene cuatro años. Al pequeño le cuesta hablar y caminar por lo que sufrió de bebé en su familia. La Casa Cuna es lo más parecido a un hogar que conoce y, el cariño de las cuidadoras, la imagen materna. Su madre real también sufrió muchas adversidades; lo visita cada tanto, pero le demuestra el interés y afecto que puede.
Como él, hay muchos niños que terminan siendo 'hijos del Estado' y cada vez son más. En 2007 hubo 14 ingresos al sistema de contención. En 2008, la cantidad trepó a 136 y en lo que va de 2009 ya van 80 internaciones.
También aumentó la revinculación familiar: el año pasado se reintegró el 63% de los chicos a su vivienda y en el corriente ya están 38 en proceso. Para Briccola las causas de esta suba están en "que la gente denuncia más -no mira tanto para otro lado- y que la pérdida de responsabilidad paterna es cada vez mayor".
Fuente:http://www.losandes.com.ar/notas/2009/8/3/sociedad-438465.asp
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